Compartimos el Taller de noviolencia activa

En estos momentos en que la violencia se manifiesta abiertamente en los diversos ámbitos en los que nos movemos, compartimos estos breves ejercicios…

la noviolencia es la fuerza que transformará al mundo" Silo.

Taller: Herramientas de noviolencia activa (TNVA o Encuentro 1)

Sabemos de la violencia porque la vivimos cotidianamente en los lugares en que nos movemos, en el trabajo, en el colegio, la escuela o la facultad, vivimos la violencia en el barrio, en el boliche, en el club, en el tránsito, … también vivimos la violencia en la familia, la violencia está presente en nuestras vidas, el punto es cómo afrontamos esas situaciones, por eso en un momento de distensión , de relativa calma podemos aprovechar para aprender algunas herramientas que practicadas y grabadas las podemos usar para no aumentar la violencia sino reducirla, achicarla en los momentos en que se manifiestan los conflictos. Los conflictos siempre están, a veces dormidos, otras se manifiestan y a veces explotan… Lo que pretendemos es tener a la mano dos herramientas, dos ejercicios que vamos a realizar y son muy útiles para empezar a reducir la violencia e intentar resolver el conflicto de forma no-violenta.

El primer ejercicio es tan simple como respirar, pero lo haremos de una forma particular:

respiración baja…

… Cerrá los párpados y aflojá los músculos lo mejor que puedas. Expulsá todo el aire sin forzamientos. Luego sacá, expandí la barriga y, en esa postura, comenzá a aspirar el aire, procurando que la sensación sea la de "llenar la barriga". Conservá el aire unos instantes y expulsalo…(*)practiquemos…

El otro ejercicio complementa la respiración baja, se trata de la postura

…Si has observado las posturas de una persona deprimida y de otra alegre, comprenderás rápidamente la relación entre posiciones y estados mentales. Pero he aquí un punto de máximo interés: así como el estado mental lleva al cuerpo a posturas determinadas, la posición corporal induce estados mentales… Ponete de pie, como habitualmente lo haces. Imaginá una línea que pasa verticalmente desde la cabeza hasta el suelo. Comprenderás de inmediato si tu cabeza está mal colocada, si el pecho está hundido, el abdomen fuera de sitio, o el bajo vientre escondido (y por tanto, los glúteos fuera de línea). No trates de corregir las malas posiciones. Simplemente, tené noción de ellas y memoriza bien sus detalles… recordá los puntos incorrectamente emplazados y comprendé qué debes corregir. Ahora hacelo: de pie corregí todos los defectos. Verás que esto no es fácil ya que durante años has formado malos hábitos en tus posiciones. Cuando creas haber adoptado la posición correcta, colocate de pie tratando de imaginar una línea que pasa verticalmente desde la cabeza hasta el suelo. Observá y seguí corrigiendo (*)practiquemos…

Para completar, diremos que la respiración baja y la postura se complementan, practiquemos las dos a la vez y las grabamos juntas. Cuando se presenta una situación de violencia en vez de dar una respuesta inmediata hacemos la respiración baja y la postura estas dos herramientas en simultáneo nos da aire y espacio para, estando en calma, podemos dar una respuesta no-violenta.

(*) adaptación de ejercicios del libro Autoliberación de Luis Alberto Ammann